Una gendarme fue asesinada de un balazo con su arma reglamentaria por su pareja.
En la casa convivían la gendarme Jésica García (26) y su pareja, Leonardo Giménez (38), junto al hijo de ambos.
La pareja comenzó a discutir y, en ese marco, Giménez tomó el arma reglamentaria de su pareja, una pistola Prietro Beretta calibre 9 milímetros, y le disparó en la cabeza.
Luego, el femicida se abrazó al cuerpo y con la misma arma se mató de un tiro.
El hijo de la pareja al despertarse halló los cuerpos de su padres y le dio a aviso a su tía.
La hermana de García llamó a la policía cuando vio los cuerpos al llegar al domicilio para cuidar a su sobrino.
La mujer declaró que la pareja, que convivía desde hacía una década, estaba por separarse debido a los hechos de violencia de género, y amenazas de muerte por parte de Giménez, quien celaba constantemente a su mujer.
La mujer nunca lo había denunciado.
El hijo de la pareja fue asistido por psicólogos del gabinete interdisciplinario Comisaría de la Mujer y quedó en guarda de su tía.
Pasó en la localidad bonaerense de Bella Vista, partido de San Miguel.