Un joven de 25 años fue asesinado a balazos, cuando detuvo el auto que manejaba para hablar por teléfono.
La víctima se trasladaba en un Renault Clio negro y detuvo su marcha para realizar una llamada telefónica.
Los testigos indicaron que fue en ese momento cuando arribó una moto y abrieron fuego contra el conductor, quien resultó fatalmente herido.
Murió dentro del auto, que quedó prendido y con las luces encendidas.
Secuestraron 7 vainas servidas, aunque una vecina aseguró haber escuchado «más o menos veinte tiros».
Pasó en el barrio Empalme Graneros, en el noroeste de Rosario
