Lázaro Choque, de 45 años, fue asesinado a puñaladas en una vivienda.
Fue su pareja Patricia Salinas, de 41 años, quien llamó a la policía y confesó el hecho, al asegurar que era víctima de violencia de género y que el hombre había violado la restricción que le impuso la justicia para acercarse a ella.
Los policiales constataron que el hombre se encontraba muerto, por lo que Salinas fue aprehendida y en el lugar del hecho se incautó el cuchillo empleado en el ataque. La mujer quedó formalmente detenida por el delito de «homicidio», a disposición del fiscal Juan Manuel Esperante de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) descentralizada de Exaltación de la Cruz